Bolivia junio 29 al 4 de julio 2011- 1017 Km

Bolivia y un último tramo para llegar a la Argentina. Mis pasos son ahora algo rápidos, quizás por la necesidad de llegar y cumplir el objetivo del viaje: Timote.
Al entrar en Bolivia el paisaje no es muy diferente a los últimos kilómetros recorriendo Perú, es seguir bordeando el Tititaca aunque ahora con menos tránsito y muy desolado al menos hasta llegar a La Paz donde solo pase por las afueras y no entre a la ciudad ya que gire hacia el sur para cruzar el país por el centro ya que de esta forma serian 500 Km menos que ir por el llano vía Santa Cruz de la Sierra. Tenía "buena información" sobre la carretera por donde iría pero fue un error. Como resumen se puede decir que el primer tramo estaba bastante bien, con algún colorido como los perros echados en la orilla del camino que empecé a ver con una distancia entre sí de 500 metros hasta un kilómetro. Todos en posiciones parecidas, casi en diagonal al asfalto y mirando atentos y con curiosidad el paso de los vehículos. Sobre mi derecha también veía rebaños de ovejas campo adentro, es decir que estos perros eran pastores que estaban descansando o ya habían terminado su jornada. Quise conocer alguno de ellos y pare para saludarlo. Le llamo la atención mi presencia y me miraba con mucha curiosidad. Intente conversar con él pero fue difícil, no parecía enojado pero si muy prudente y le costaba acercarse y hasta para convidarle una galletita, si bien mostraba interés en ella, la única forma de que la probara fue arrojándosela y así si se entusiasmó pero siempre manteniendo una prudente distancia. Supuse que solo era su carácter y seguí viaje hasta el próximo perro para hacer el mismo intento. Todo fue igual que el anterior y entonces busque un tercero y la misma situación se repetía. Pare en total en cinco perros y todos con el mismo comportamiento, la misma actitud de precaución. Si movían sus colas para agradecer las galletitas, pero de compartir un rato, ni hablar.
Una diferencia en los colores entre Bolivia y Perú me llamo la atención. En los pueblos chicos o enlas afueras de las ciudades se puede ver todo tipo de construcción sin terminar, sin revoque y sin pintura, solo ladrillos. La gente me dice que generalmente es por falta de dinero y que lo dejan pendiente para “quizás más adelante”. Los ladrillos son de un marrón muy apagado y le da al conjunto un sabor tristón y precario. En Bolivia es el mismo estiloen cuanto a los motivos y la falta de terminación, pero los ladrillos que usan son con tonosrojizos yvivos; Es un pequeño detalle pero que mejora muchísimo el paisaje urbano haciéndolo más vistoso y alegre.

Por momentos aparecen algunas zonas verdes con algo de producción agrícola y ganadera aunque no se ven alambrados. Las rutas son pocas, con poca señalización y autopistas creo que no existen, pero hay algunos proyectos en desarrollo, sobre todo al sur donde están construyendo una buena ruta de montaña con buen diseño y que llegara hasta la frontera con Argentina. Solo pude transitar por allí unos pocos kilómetros medianamente habilitados, el resto fue turismo aventura, muchísimos kilómetros y horas adivinando caminos posibles, cruzando vados, por quebradas bordeando ríos secos, tierra y polvo y en fin todo lo que no pensaba encontrar, más aun luego de pagar un peaje para hacer unos 400 km donde el que estaba en la casilla me aseguraba que todo el tramo estabaasfaltado y en buenas condiciones y eso fue así pero solo 17 kilómetros. Así y todo la experiencia fue excelente, por el paisaje mayormente árido (siempre lindo y por momentos alucinante), por la altura, por las pocas poblaciones donde entre, por los pueblitos y su gente alejados de todo y enteramente construidos con barro y que son un viaje en el tiempo.

Son más de 1000 kmviajando entre 3400 y 4500 metros de altura, y gran parte por la planicie andina que es una gran pampa árida donde solo se ven algunas formaciones rocosas y nada de montañas y es que en realidad se viaja por la parte de arriba y ellas están para abajo. Potosí, una ciudad colonial y hoy turística es un lindo lugar para conocer y entre otras cosas tiene un monumento a Maradona (crease o no). Está a más de 4000 metros y sus calles o callecitas, pasillos y escaleras son muy empinados.Me resultaba muy complicado andar con la van con desniveles tan pronunciados e incluso tuve un par de sustos pero que afortunadamente no pasaron de allí.

Otro lugar donde me quedeun par de días fue Tupiza, una pequeña ciudad ya cerca de la frontera, muy prolija, turística, colonial y antigua, enclavada entre dos formaciones montañosas altas que la hacen muy particular. Lugar tranquilo con buena onday como toda Bolivia muy económica.

Unos kilometros mas de montana y ya bajando de a poco en altura hasta llegar a Villazon ciudad fronteriza con La Quiaca y entrar en casa Argentina.

Frontera Peru-Bolivia 28 de Junio 2011